El relleno

Cualquier cosa hecha de cuero y relacionada con el caballo o la tapicería de lo que tira era responsabilidad del guarnicionero-sillero: arnés, collar de hombro, silla de montar, los interiores de los carruajes y otros carruajes. La edad de oro de este oficio fue en el siglo XVIII y la primera mitad del XIX.

Con la mecanización de la agricultura y el abandono del caballo como animal de tiro, la parte agrícola de su producción casi había desaparecido en el período de entreguerras. Estos artesanos siguieron la evolución de los carruajes de caballos tapizando los primeros automóviles.

Ilustraciones:

– Fotografía del taller del maestro artesano guarnicionero Robert Beausseron en 1936 en Saint Astier. (Colección privada en Hervé Mercier, Saint-Astier, 1900-1950, volumen 2, La vie Astérienne, Imprimerie IOTA, 2015)

– Tarjeta postal con la fachada del taller Mazière, guarnicionero en Mussidan en los años 30, situado justo enfrente del garaje de coches Volon, una imagen simbólica de la transición de un modo de viaje a otro. (Colección Chica ©Musée André Voulgre) 2014.9.359